lunes, 23 de septiembre de 2013

Patrimonio Intangible: "El Moussem de Tan Tan"

A inicios de este mes de septiembre, se celebraba a las afueras de la ciudad marroquí de Tan Tan el encuentro cultural que se lleva a cabo cada año al suroeste del país: el "Moussem". Como si de una gran fiesta se tratase, esta especie de feria se desarrolla a lo largo de una semana con un buen número de actividades de tipo económicas, sociales y culturales. Los principales protagonistas y asistentes del evento son las más de treinta tribus nómadas venidas tanto del sur de Marruecos como de otros países norteafricanos. Estas poblaciones se asientan en una gran planicie cercana a la ya nombrada ciudad de Tan Tan, donde jaymas y arena se funden durante esa semana.

Pero, ¿desde cuándo se realizan estas jornadas culturales saharianas? Para saberlo, debemos remontarnos al año 1963, cuando se celebró la primera edición de este encuentro. Las tribus se reunían y montaban sus jaymas en torno a una especie de pozo y allí conversaban e intercambiaban productos y conocimientos. También se daban otro tipo de situaciones como las celebraciones de bodas. Por ese entonces, estas reuniones se daban en torno al mes de mayo, coincidiendo con el calendario agropastoral. Se dice que uno de los primeros impulsores del Moussem fue un miembro de la resistencia a la ocupación franco-española, Mohamed Laghdaf. Tras varios años celebrándose, el Moussem se vio interrumpido en torno a 1979, momento en el el Sáhara Occidental es abandonado por Mauritania pero pasa a ser ocupado por Marruecos desde ese entonces y hasta día de hoy ("Guerra o Conflicto del Sáhara Occidental", 1975-actualidad). Aún así, en el año 2004 se volvió a recuperar esta iniciativa con el apoyo de la UNESCO y de otras personalidades, siendo el explorador Kitín Muñóz uno de los principales divulgadores del recién recuperado Moussem de Tan Tan.


Como ya hemos comentado, las actividades realizadas durante el encuentro son numerosas, llenas de alegría y colorido. Así, a la vez que los familiares y amigos se reencuentran, charlan y disfrutan del evento, se desarrollan actos como el intercambio comercial, ventas de animales y productos (caballos, camellos, plantas medicinales...), diferentes muestras culinarias (donde destacan la carne y la leche de camella) y de artesanía (como el cuero o la madera), desfiles, danzas e interpretaciones musicales y recitales de poesía y de historias tradicionales. Destacar también la Tburida, una demostración del arte ecuestre sahariano en la cual un grupo de jinetes a lomos de sus caballos (los barbos o caballos del desierto) deben cabalgar sin sujetar las riendas a la vez que disparan con sus fusiles hacia el suelo, mostrando así su grado de equilibrio y su precisión y coordinación al galope.

El atractivo y la gran riqueza cultural de esta asamblea interactiva le ha valido al Moussem de Tan Tan el ser declarado por la UNESCO como "Patrimonio Oral en Inmaterial de la Humanidad" desde el año 2005. Pero a pesar de estar calificado como tal, con el paso de los años la esencia del Moussem se ha visto un tanto tambaleada por el auge de la urbanización y del desarrollo tecnológico, algo que preocupa entre algunos de los organizadores del evento, ya que temen que esta tradición sahariana se pierda con el paso del tiempo. Así se expresaba el Cónsul general del reino de Marruecos en Canarias, Ahmed Musa, en un artículo del periodista Ángel Tristán Pimienta que trataba sobre el Moussem: 

"Tenga en cuenta que hemos pasado de la jayma a la casa; del camello al coche; de la soledad al móvil".

Y añade Tristán Pimienta:

"Pese al móvil, el ritual de los saludos se mantiene, las preguntas por los padres, los hermanos, los hijos, el ganado..."

La búsqueda de un equilibrio entre desarrollo y tradición se hace fundamental en este asunto, y a pesar de este problema y de la tensión política subyacente (los conflictos entre Marruecos y Sáhara Occidental por la independencia de éste último), no se debe olvidar el cuidado y la conservación que merece un bien del Patrimonio de tanto valor documental como es este Moussem de Tan Tan.



Más información:

http://www.moussemdetantan.org/es

http://www.ikuska.com/Africa/Etnologia/Pueblos/saharawi/moussem.htm

http://www.laprovincia.es/agenda/2013/09/20/pueblo-mar-arena/559071.html

domingo, 22 de septiembre de 2013

La Odisea del Tesoro Español: "Las Cajas Españolas"

Año 1936. Es el principio del fin de la Segunda República española. Un golpe de Estado orquestado por Francisco Franco y otros compañeros militares daría comienzo a una etapa oscura y de decadencia que sumiría al país en una larga y amarga dictadura militar. Un conflicto que tendría su base en una encarnizada guerra civil que dividiría por completo a la población española de ese momento. 

Sin embargo, entre tantas sombras, se produjo un suceso que proyectó algo de luz en tiempos tan difíciles y cuyos efectos alcanzarían hasta nuestros días, al mantener prácticamente intacta una buena parte de nuestro pasado histórico y cultural. Y es que, como ya comentamos en la anterior entrada, no hay que olvidar que otra de las grandes víctimas de los conflictos armados es el Patrimonio Cultural.

Precisamente, eso es lo que nos quiso reflejar el documental visionado el pasado 18 de septiembre en clase, "Las Cajas Españolas", la odisea silenciosa que hubieron de soportar las grandes obras artísticas del Museo del Prado durante la Guerra Civil (1936-1939). Al desatarse unos duros enfrentamientos entre las partes más extremistas de los dos bandos políticos de la Guerra, el gobierno republicano entendió que habrían de tomarse medidas urgentes para evitar una gran perdida patrimonial que sería irreparable. Los ataques y saqueos de algunas iglesias o de edificios aristocráticos eran sólo el comienzo. Así, se decretaba la creación de la "Junta de Defensa del Tesoro Artístico", la cual se encargaría de salvaguardar algunos de los bienes culturales españoles más valiosos; al frente de la misma, personalidades como Timoteo Pérez Rubio o José Mª Giner Pantoja, los cuales hicieron posible el desarrollo de esta misión.
Ante la creciente oleada de violencia y la cercanía del bando sublevado a la capital madrileña, se tomará la decisión de desalojar el Prado y de trasladar su ingente cantidad de obras a Valencia, para luego volver a movilizarse hasta Barcelona y, finalmente, ser llevadas al extranjero, primero a Francia y luego a Ginebra. La gran preocupación por el estado de las obras hizo que su movilización se realizara con grandes cuidados y tratamientos, colocándose cada cuadro dentro de unas cajas que eran preparadas con suma delicadeza. Una vez listas, eran llevadas en camiones a través de las peligrosas carreteras del país, sorteando las bombas y los posibles ataques del enemigo, hasta llegar por fin a los "depósitos" de destino de las obras, que a su vez eran también protegidos concienzudamente (caso de las "Torres de Serrano" en Valencia).

El caso del "tesoro español" tuvo tal repercusión que grandes figuras de la Cultura de ese entonces, como Rafael Alberti y María Teresa León, se interesaron y participaron también en la organización del traslado de las obras. Así mismo, en la prensa internacional se hacen eco de la situación de los bienes del Museo. En un principio, desde un diario británico se barajó la posible mala gestión y desaparición de los mismos, pero los dirigentes de la Junta de Salvamento no dudaron en hacer frente a estas críticas, e invitaron a dos periodistas ingleses a observar por sí mismos el estado de las obras. ¿El resultado? Admiración y alegría; tras retractarse de sus opiniones iniciales, felicitaron a los conservadores españoles por la buena labor que estaban desarrollando.

Paralelamente a estos hechos, Madrid es bombardeada y el Museo del Prado se ve afectado. En el último año de la guerra, Franco ya tiene prácticamente ocupado todo el territorio, y la única vía de escape para la Junta y las obras, es el extranjero. De este modo, creaciones de Velázquez, Goya, Rembrandt, El Greco, Tintoretto, Tiziano y muchos más, viajaron más allá de España, evitándose así su posible pérdida.

Aún así, su estancia en el exterior fue breve. El 1 de abril de 1939 se daba por terminada la Guerra Civil española y daba comienzo un nuevo periodo, el de la Dictadura. Franco solicita la devolución del tesoro español, lo cual se cumple al serle reconocido su nuevo gobierno. Cerca de 2.000 cajas salvadas que, sin embargo, ahora debían de retornar a manos de aquellos de los que la Junta había huido. Un final un tanto amargo que, sin embargo, no empaña la gran labor realizada por aquel grupo de personas que habían arriesgado sus vidas para salvar algo que suele ser tan olvidado en tiempos de guerra. Sorprendente es la determinación de Manuel Azaña, cuando afirmaba que prefería abandonar el poder de la República en manos de los golpistas antes que perder un legado tan valioso como es ese gran Patrimonio artístico y cultural que constituye el aclamado Museo del Prado. Y es que, no siempre las grandes victorias se consiguen por medio de las armas.


Más información:




sábado, 21 de septiembre de 2013

¿Qué es el Patrimonio Cultural?

En su artículo Patrimonio Cultural: Diferentes perspectivas, publicado en Arqueoweb, la profesora Angélica García López nos cita una curiosa definición de Patrimonio Cultural, realizada por José Antonio Ruíz Gil en una de sus obras:

"Hablamos de nuestro río, de nuestro pueblo (...) como experiencia colectiva. Los que nos visitan reciben individualmente esa experiencia social que se forma básicamente por la tradición, los trabajos científicos o profesionales y la forma de ver el mundo propio de cada sociedad".

En contraposición a la simple definición de la palabra "patrimonio" (del latín, patrimonium), que hace referencia al número de bienes que una persona ha heredado de sus padres, es decir, algo privado; la unión con "lo cultural" convierte a este vocablo en algo colectivo, de todos y para todos, de la sociedad. Un basto conjunto de bienes, ya sean tangibles (muebles e inmuebles) o intangibles (tradición oral, celebraciones, música...) que forman parte de una comunidad y, en general, de la humanidad. Ésta ha sido heredera histórica de una serie de elementos y de conocimientos y, a su vez, transmisora de los mismos a las generaciones siguientes. Como bien dice DeCarli, el interés es el de "preservar, continuar y acrecentar dicha herencia".

Es, al fin y al cabo, una misión que consiste en tratar de mantener viva parte de nuestra historia y, especialmente, de conocer a través de todos esos tipos de bienes las características esenciales de una cultura determinada. Y, por supuesto, de protegerla, ya sea por su antigüedad o por posibles agresiones que pueda llegar a sufrir. 

Sin embargo, ¿entendemos por igual el valor de un bien patrimonial y cultural? ¿Tenemos todos el mismo interés por protegerlo?

Como respuesta tenemos algunas imágenes:

Estatua de Buda destruida por talibanes. Afganistán.

Saqueos en el Museo Nacional de Malawi durante las revueltas en Egipto.


Mezquita Omeya de Alepo, en ruinas debido a la guerra en Siria.












Yacimientos arqueológicos ocupados y expoliados durante la Guerra de Irak.


















Grabados rupestres estropeados con las "firmas" de sus visitantes. Montaña de Agüímes.



Conflictos armados e ideológicos, revueltas sociales, intereses políticos... o, simplemente, la más pura ignorancia; son algunos de los motivos por los que se pierde a veces buena parte de nuestro Patrimonio. E incluso, las causas económicas pueden ser otro elemento que harían peligrar al mismo:

La Montaña de Tindaya y el proyecto de Chillida.




Oasis de Maspalomas en los años 60.










Oasis de Maspalomas en los años 70.













(Hotel) Oasis de Maspalomas en la actualidad.

Las prospecciones petrolíferas y su posible impacto sobre Canarias.

Y es que no sólo se considera como Patrimonio de todos aquello que ha sido construido o moldeado por la mano humana. El Patrimonio Natural, el de la tierra que pisamos, también debe ser cuidado.

En general, cualquier tipo de patrimonio puede estar sujeto a intereses ajenos, tener diversos fines y ser entendido de mejor o peor manera por la colectividad. Este último aspecto podríamos asociarlo al polémico debate de las corridas de toros. ¿Podemos entender que haya gente que defienda actos como estos? ¿Tienen razón al ceñirse al argumento de "tradición" a la hora de tratar de justificarlos?... Hace siglos que el Imperio Romano cayó, pero aún podemos acercarnos a Italia, y observar grandes monumentos como es el caso del Coliseo, donde se celebraban actos como el de las ejecuciones de prisioneros o las luchas de gladiadores. Otra arena teñida de sangre en tiempos pasados, pero que nos ha dejado en la actualidad uno de los monumentos más valiosos y visitados de nuestra historia, siendo además declarado "Patrimonio de la Humanidad" desde la década de los Ochenta.

Y es así como podría ser entendido el Patrimonio Cultural: un reflejo de lo que fuimos, de lo que somos y de lo que está por llegar. Es nuestra Historia, el testimonio y el legado de la humanidad, algo que no se debe olvidar. Tan sólo debemos aportarle algo: protección. Y como devolución obtendremos un sinfín de aportaciones históricas, valores culturales y enseñanzas. 

Patrimonio al Descubierto

Bienvenidos a "Patrimonio al Descubierto", un blog de carácter didáctico e informativo en el cual podremos explorar con más profundidad el mundo del Patrimonio Cultural, publicándose un poco de todo en lo referente a la dicha materia. Aparte de repasar lo aprendido en clase, se mostrarán noticias, curiosidades, descubrimientos... que nos pueden ayudar a conocer el Patrimonio y a centrar nuestro interés un poquito más en el mismo.

Intentaré poner temas interesantes y espero que podamos compartir opiniones y demás sobre este espacio.

¡Saludos y gracias por la visita!